Roger Wolfe

Roger Wolfe nació en Westerham, Kent, Inglaterra, en 1962. En el año 1967, su familia se trasladó a España, y Wolfe —como es natural, a tan tierna edad— se desplazó con ella a nuestro país. Es poeta y escritor, aunque él prefiera la vieja palabra «artista», en el viejo sentido entendida. Se gana el sustento —todavía hoy— como intérprete y traductor.


Al margen de sus millones de palabras de traducciones alimenticias, Wolfe ha desarrollado también amplias y fecundas labores como traductor literario (de poesía, ensayo y narrativa), y rara es la semana en que —por pura vocación y amor al arte— no pergeña algún nuevo trasvase del inglés al español, que normalmente sube a su blog, La Bitácora del Hombre Solitario, en marcha en internet desde el año 2015 (este blog, por sus características y su alcance, bien podría ser considerado el gran «libro vivo y en curso» del escritor).


En lo que se refiere a su obra propia, escrita casi toda ella en la lengua de Cervantes (hemos olvidado mencionar, más arriba, que Roger Wolfe se crió en Alicante, y que ha pasado la mayor parte de su vida en España), el autor ha publicado unos veinticinco libros desde los inicios de su carrera, que abarcan la poesía, el ensayo, el relato y la novela. Se ha dedicado también a la música, y colaborado en dicho campo con artistas como Diego Vasallo, Suso Saiz, Rafael Berrio y Miguel Marcos Fernández. En este apartado musical, cabe destacar el disco que con Diego Vasallo y Suso Saiz dio a la luz en 2006, con el título de La máquina del mundo.


Wolfe ha rodado larga y anchamente por la Piel de Toro, residiendo en diferentes etapas de su vida en la ya mencionada Alicante, en Asturias y en Madrid, lugar este último en el que tiene su hogar desde 1999.